Los miembros del Congreso han presentado varios proyectos de ley diferentes destinados a fortalecer la protección de niños y adolescentes en línea.
Una es una medida de amplio alcance, la Ley de Seguridad Infantil en Línea (KOSA, por sus siglas en inglés). Exigiría que los servicios en línea, como las redes sociales, los sitios de videojuegos y las aplicaciones de mensajería, tomaran “medidas razonables” para prevenir daños –incluidos el acoso, la explotación sexual, la anorexia, la autolesión y el marketing predatorio en línea– a los menores que usan sus servicios. plataformas. .
También requeriría que los servicios habiliten las configuraciones más altas de privacidad y seguridad de forma predeterminada para usuarios menores de 18 años. Y permitiría a los jóvenes limitar o desactivar funciones como noticias personalizadas, notificaciones de teléfonos inteligentes y videos de reproducción automática «que resultan en un uso compulsivo» de aplicaciones.
Copatrocinado por los senadores Marsha Blackburn, republicana de Tennessee, y Richard Blumenthal, demócrata de Connecticut, KOSA cuenta con el apoyo de decenas de otros senadores. También ha obtenido el apoyo de importantes grupos infantiles y asociaciones médicas, incluida la Academia Estadounidense de Pediatría. Y Snap, la empresa propietaria de Snapchat, se convirtió recientemente en el primer gigante de las redes sociales en respaldar a KOSA.
Pero el ambicioso proyecto de ley enfrenta una ardua batalla.
Grupos de derechos civiles, incluida la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles y la Electronic Frontier Foundation, un grupo de derechos digitales, se opusieron por motivos de libertad de expresión. En particular, los grupos dicen que la definición de daño del proyecto de ley es tan amplia y vaga que podría llevar a las redes sociales y otras aplicaciones a censurar contenido sobre temas políticamente polarizantes como la salud reproductiva o la identidad de género.